Martino no se prende a la ola de elogios por los últimos resultados de su Newell’s, aunque reconoce que pueden estar en una posición expectante. También dijo que ya cumplió sus sueños en el fútbol.Gerardo Martino no es de dar muchas notas mano a mano, y por eso cada vez que lo hace es escuchado atentamente. El técnico de Newell’s siempre mantiene un equilibrio entre los elogios y las críticas, manteniendo los pies sobre la tierra. “Podemos seguir ganando o perdiendo. Si ganamos algún partido más nos va a posicionar en un lugar de privilegio con relación al título y si llegamos a perder más partidos volveremos a ser el equipo del año pasado”, manifestó en La Red.“En el fútbol argentino se va todo muy rápido. De repente en un equipo grande te aparece en una sola fecha y es la noticiai. Yo creo que Newell’s ha jugado dos partidos muy buenos, pero la trascendencia de la victoria contra Vélez superó la trascendencia de Rafaela. Nosotros no tenemos que ir al compás del medio, sino que tenemos que ir al compás de lo que nos conviene a nosotros”, destacó.En cuanto a la situación del equipo en el momento que asumió, dijo. “El panorama no era tan malo como lo hacían ver. Yo ví muchos partidos de Newell’s desde la platea y lo corroboré cuando me puse a trabajar con estos jugadores. Cuando tomé la decisión estaba tranquilo porque sabía que había tomado la decisión que quería tomar. He cumplido dos objetivos personales. Uno es haber dirigido en un Mundial y a Newell’s. Dirigir a la Selección sería algo extraordinario pero dirigir a la Selección no es un sueño”.Con relación a la discusión de cuanta importancia tiene un director técnico, el Tata comentó que para él lo más importante son los jugadores. “Discrepo con eso que los técnicos somos más importante que los jugadores. Tenemos una dosis de importancia, pero de ninguna manera somos tan importantes con quienes tienen que definir una situación dentro de una cancha. No me gusta que se ponga a los entrenadores en una posición de privilegio. Yo prefiero que sea más como era en mi época, en la que muchas veces la gente no se acordaba quien era el técnico de un equipo. La gente se acordaba siempre de los jugadores. Cuando era jugador pensaba que los jugadores eran lo más importante y ahora que soy entrenador sigo pensando lo mismo”. Después, el DT leproso explicó cómo decidió aceptar tomar la dirección técnica del rojo y negro. “Uno no es tan loco de ir a un lugar sin hacer una evaluación previa. Yo no soy tan patriota como me quieren hacer ver, pero está claro que hay una decisión que pasa por lo profesional y el corazón. El corazón le ganó a la razón”. PUBLICADO POR OLE.
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