Dany Ramos "Eternamente Potrero Argentino"

El fútbol rosarino, esa mezcla de bohemia, arte, pasión,cuna no solo de la bandera Argentina sino de grandes cultores del arte del balompié… esa semblanza que amontona calidad, clase y sobre todo el destello de la técnica individual que se manifiesta a veces egoísta, pero que al finalmuestra el valor agregado cuando se trata de hacer un picado y resolver una jugada de gol. De ese fútbol provengo, al igual que los miles que gozan por pertenecer y que lo aman por sobre
muchas otras cosas que son parte de la cotidianeidad. Sucede que a la vera del Rio Paraná el fútbol es más que un simple deporte, se hace sublime, magistral y forma parte de una “marca registrada” que desciende como manantial de agua fresca directamente desde el potrero, que es la primera escuela no solo deportiva , sino de vida. Y que es el potrero???: es un espacio libre, un campito, o como decimos en el barrio, el hueco!, quizá la segunda casa, es un terreno de juego sin demarcaciones, con dos arcos hechos como se puede, con palos, botellas, ladrillos, ropa apilada o con cualquier material que logre sobresalir y así lograr emular al tradicional marco de 7,33 x 2,44 cm que sirve para anotar el gol.
Más allá de la línea de meta no hay nada y a los costados menos, lo cual lo hace todo siempre digno de controversias. En el verano un equipo juega con camisetas de variados clubes y matices y el otro en cuero!, no hay capitanes, ni árbitros severos, tampoco sabios entrenadores , policías o padres efervescentes y mucho menos, una hinchada fiel que arremeta cánticos y oles!!!. En mi caso, el potrero inicialmente era “la vereda” (allí comenzamos las primeras experiencias con juegos que formaban parte del programa de entre casa de aprendizaje , EL MEMORABLE PECHITO VALE DOBLE, EL RECORDADO GOL ENTRA, EL INFALTABLE JUEGO DE HACER PASES CON LA CABEZA LLAMADO COCA COLA, O SIMPLEMENTE EL TIRAR UNA SERIE INACABABLE DE PENALES USANDO EL PARAISO (ARBOL TRADICIONAL) Y LA PARED COMO ARCO) que por ese entonces se convertía en la previa antes de llegar al verdadero estadio de la ilusión que era mi calle de tierra!. Estamos en una Rosario en los comienzos del 70 cuando los barrios de periferia se encontraban con poco pavimento y mucha calle de tierra, fangosa cuando las lluvias y áspera después de tantos días de calor tórrido, que junto a la memorable zanja formaban parte de la fisonomía del lugar. Allí con los amigos jugábamos interminables partidos dos contra dos, tres contra tres y los sábados por la
mañana entrabamos en competición seis contra seis, donde los pibes de 8 o 9 años se entremezclaban con los de 16 o más!. Era una linda sensación JUGAR CON LA PELOTA DE GOMA puesto que el fútbol se convertía en algo fenomenal, sacro, que quedaba en la retina plasmado por varios días hasta que se volvía a repetir. No importaba tanto quien ganaba lo importante era demostrar lo que se sabía hacer. Digamos que el potrero era la máxima expresión individual que podía existir lo cual lo hacía totalmente diferente al fútbol organizado, puesto que se mostraba mucha improvisación dentro de un ámbito poco reglamentado. Sobresalía el gesto técnico individual reflejado en la gambeta corta y sinuosa , la mareada, como comúnmente
viene llamado el dribbling en la jerga rosarina , donde el jugador tenia una función poco colectiva ya que siempre quería pasar a todo el equipo adversario antes de dar el pase o hacer el gol. Era la cuna de la técnica, donde al menosyo, aprendí el ABC del fútbol , a su vez era el escenario ideal donde se probaba la imaginación, ya que había que resolver en pocos metros numerosas
acciones o jugadas, donde venían desarrolladas con eficacia todas las características que hacen al control, dominio, golpeo, y traslado del balón etc. Todo esto con un alto contenido lúdico pues
en el potrero lo fundamental es JUGAR y allí quizá está una de las claves que lo han hecho famoso y lo ponen el la cima de los “verdaderos centros de formación”, sobre todo cuando se habla del talento del pibe de barrio y los misterios que ello encierra en ese ambiente, donde el jugar y el juego en si, sobre pasa a los sistemas y las tácticas y va por delante de cualquier tipo de estrategia y organización. Primero se aprende a jugar y después se sigue con el resto. Lamentablemente estos potreros van desapareciendo por la enérgica urbanización e incluso las modas, las computadoras, los estudios, el gimnasio lo van relegando y entonces se pierde la esencia mítica de este lugar. ¿Se puede decir entonces que el potrero es la principal influencia en la etapa formativa?
Pienso que en otras épocas ha sido fundamental y se puede dar confirmación ya que Sudamérica ha sido y es forjador de talentos y como se dice mundanamente, los que mejor juegan provienen del “potrero” e quizá aún queden algunos lugares en los barrios que ayudan y son imprescindibles para ser jugadores de verdad. El mismísimo Maradona regateaba y mareaba a sus contrincantes en el campito de Villa Fiorito en su Buenos Aires natal, allí donde la cancha era de tierra no tan pura, donde jugaban hasta con sevillanas escondidas en los pantalones o en
la medias y donde los transeúntes no podían dejar de detenerse para verlo crear sus fantasiosas jugadas!. Y el Diego como muchos campeones a nivel nacional e internacional era producto de este reducto brillante, forjador de talentos y de pasiones encontradas.
Ahora bien cuando hablamos de los grandes jugadores rosarinos o sudamericanos en si que son
notables embajadores de esta disciplina a nivel mundial nos preguntamos..Y cuanto tienen ellos de potrero?. Este se lleva en la sangre?, hace parte de la genética?, es algo que viene del
instinto?.
Si dilucidamos que Lionel Messi que por tercera vez es elegido el mejor jugador del mundo y que el mismo comenta aseverando que sus inicios fueron su calle y que sus capacidades técnicas se vieron favorecidas por haber desde chiquito jugado en ella con sus hermanos y amigos, esto sin dudas confirma el valor que el estilo potrero confiere a quienesentran en contacto intimo con el. No es
difícil pues comprender que esa picardía que nace en el potrero después se
lleve a los grandes estadios con total
normalidad y Messi es ejemplo de ello y se lo distingue en el “esconder” la pelota como él lo hace
para que no se la roben y en correr rápido en trancos cortos sin mirar la pelota, ser muy hábil en los espacios cortos limpiando a los adversarios como postes caídos o en el pase milimétrico que son jugadas propias del baldío y si lo miramos clínicamente veremos que es muy difícil que Messi te haga un cambio de frente de 30 mts quizá porque es muy raro que se vea en el potrero, porque no haga falta ya que es mejor un pase corto, una pared o una “cucharita”, que desprenderse de la
pelota extendiendo la longitud delterreno de juego, eso si cada tanto filtra la pelota con pases precisos en profundidadque terminan el gol y como se dice en el “hueco”, el pibe vio el pase y lo
tiró.
Y es todo habilidad , destreza? o también astucia? Ya que el jugador aprende no solo las capacidades técnicas que (“Son todas aquellas acciones que es capaz de desarrollar un jugador de
fútbol dominando y jugando el balón en beneficio propio finalizando una jugadasin la intervención de otros compañeros del equipo) sino también aprende a interpretar el juego en situaciones límites, a controlar espacio-tiempo y a caer, ya que cuando se va al piso, es muy
probable que se lastime, raspe o machuque la piel.Pero volviendo al tema, el potrero también es un reto, no todos los potreros son iguales, están aquellos donde todos juegan, incluso el
gordito dueño de la pelota que llega siempre ataviado con sus pantalones con el clásico numero 1, la camisetaprolijamente dentro del pantalón y los botines limpitos y siempre brillantes .
Por otro lado están aquellos potreros donde juegan los que más saben y donde si te elijen, es porque realmente lo vales y llegas con la jerarquía de ser “bueno”. Se jugaba por la gaseosa y los
más “profesionalizados” por algún dinero que al final por culpa de este, se terminaba en riña y escapes a toda velocidad por el corazón del barrio, ya que casi siempre el que perdía no podía cumplir. Pero en todas las situaciones y modalidades, es como el jugador sigue buscando jugar sin ser objeto de la gobernabilidad de las reglas o simplemente siendo rebeldes a estas. El potrero es símbolo de calidad extra, porque da ventajas puesto que si de calidad se habla quien se acostumbra a jugar en esos lugares y tiene el talento, es seguro que se destaca en los campos reglamentarios y también es sinónimo de diversión, allí el jugador se divierte de verdad y porque no? de formación psicológica, pues quien juega bien allí puede jugar en cualquier lado con calidad técnica y con idoneidad suprema. Hoy cuando el fútbol esta cambiando se habla mas de preparación y exigencias, que de jugar, ya no quedan muchos espacios y por ello se debe “pagar” para hacer el clásico picado en una cancha de hierba sintética o cuando un talentoso quiere trascender debe recurrir a dobles turnos de entrenamiento auxiliado por algún entrenador
para poder probar en los clubes profesionales, algo que antes era normal presentarse así, con lo que uno había experimentado en el potrero, puesto que bastaba para demostrar el caudal futbolístico que se poseía, en fin…se modifican las cosas, se van perdiendo lugares pero no los recuerdos y los modos, pues estos son parte del patrimonio de vida que uno lleva consigo!.
DANY RAMOS, ARGENTINA

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
excelente articulo sobre el potrero, me siento totalmente identificado porque fue tambien mi primera escuela, la verdad que el relato me hizo volver al pasado. Felicitaciones me encanto - Pepe Basualdo