La cátedra se inquieta: tres técnicos que predican buen fútbol sacan a la hora de los cambios a quienes juegan bien, si es que vale la expresión para los de buen pie, a quienes tratan bien la pelota. Los técnicos, esta vez, fueron Juan José López, Cappa y Schurrer. Los relevados. Lamela, Neira y Valeri.
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| JUAN JOSE LOPEZ |
Ante esta situación, hay quien califica a los técnicos como miedosos. Que cuando ven el partido complicado ganando por un gol, o igualando de visitante, sacan al creativo y hacen cambios defensivos. Yo respondo que también, como ellos, sería un tremendo miedoso si trabajara de técnico en este fútbol, tan precario en cantidad y calidad de creativos, de jugadores que hagan la diferencia. No es ningún defecto. Es simplemente porque los rendimientos, y los armadores que están (Verón, Riquelme), lo hacen por placer porque quieren terminar sus carreras acá.
Además, otro hecho clave es el cambio de posiciones y funciones. La historia del creativo siempre existió; sin ellos, el fútbol no existiría. Veamos desde la época de Pelé, año 1960 en adelante. El de esos tiempos jugaba con el famoso número 10, pero en realidad era media punta. No un medio, tampoco atacante de área. Jugaba por el andarivel izquierdo hacia el centro. Cuando el rival tenía la pelota sólo hacía una función: tirarse unos metros atrás para recibir cuando su equipo la recuperaba. Ermindo Onega, Daniel Willington, y otros grandes de la posición, después Alonso, Bochini, más acá otros incluyendo Maradona, que para mí fue el último diez, casi no se ocupaban de la recuperación. Hoy a Lamela, a Lanzini o a Román, por más que la rompan, si no dejan el alma en la recuperación, no juegan. Se lo exigimos más que a cualquier tronco que patea para donde está mirando. Hoy el enganche tiene que gambetear, tirar paredes, hacer lo impensado, tener la pelota si vamos ganando, llegar al área, hacer goles, y además, trabar en la recuperación. Se fueron fundidos todos los cambiados en este torneo por los técnicos aparentemente "miedosos". Les exigimos que sean lo más en todo. Una locura. Por el otro lado (otra locura), le dimos la aliviada al 5 solitario y tradicional, y le pusimos un complemento, alguien que corra por él o al revés, pero ahora son dos cinco.
Y los enganches ya empiezan a ser sociedades, Lo vimos en Sudáfrica, en el Barsa, acá con Lanzini-Lamela, Ramírez-Moralez, El tema es que sean complementarios para repartir funciones, no suplementarios para lo mismo y se anulen uno al otro. Es lo que buscan J.J. López, Cappa y Schurrer. No es que sean miedosos.
OLE:Roberto Perfumo "Los técnicos no son miedosos por sacar a creativos"
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