Llegar a la etapa cuadrangular del fútbol como el candidato con menos posibilidades de avanzar, le quita presión al Real Madriz .
El técnico del equipo somoteño, Sindulio Castellanos comentó que estar en la cuadrangular ya es “ganancia” y todo lo que venga será porque Dios así lo dispone.
“Con tantos problemas en el torneo no pensé que se iba a clasificar, le pedí disculpas a los jugadores y aficionados por no tener fe, pero en verdad fueron muchos inconvenientes que al final se lograron superar y estamos aquí… todo lo que venga será ganancia”, dijo el técnico hondureño.
Y es que el Real Madriz es el equipo con menor presupuesto de los cuatro clasificados, aparte de eso, la directiva enfrentó problemas en el transcurso del torneo y al finalizar la etapa regular todavía le debían mes y medio de salario a la mayoría de jugadores.
“Estamos en banca rota” fue una declaración de uno de los directivos, que a sabiendas de las necesidades de los jugadores, les confió la noticia y esto en cualquier club será un desastre, pero no en el Real Madriz donde, en verdad, tanto nacionales como extranjeros, juegan por amor a la camiseta.
“Aquí hay jóvenes con grandes cualidades, tienen buen fútbol y sobre todo aman a su equipo. El corazón que tienen estos muchachos no se compara con nada” comentó el técnico catracho que por las mañanas imparte clases en un colegio de San Marcos de Colón, Honduras, y por las tardes entrena a un aguerrido equipo.
El ánimo que se respira en el club somoteño podría contagiar a cualquiera, y aunque saben avanzar a la final no será fácil, tienen mucho optimismo para repetir una final después de cuatro años.
Veteranos como Miguel Ángel Sánchez, Eder Benavides y Juan Carlos Vílchez, están convencidos de hacer un buen papel, y se suman los extranjeros como Jonathan Juárez, José Chimilio y Jairo Soza.
Y no se descartan a jóvenes talentos como Yáder Vásquez, Aldrin López, Alvaro Bermúdez, Mauricio Cajina y Elvin Padilla, que han sido pieza fundamental a un juego bastante ofensivo que practica el técnico Castellano.
Comentarios